Toda maquinaria requiere su mantenimiento especial, y resulta común pensar que un vehículo personal requiere solo de combustible, lubricación y refrigeración, pero la durabilidad de este transporte va más allá, por ello es importante conocer todos los cuidados que requiere y mantenerlo al día.

Amortiguadores

Los amortiguadores proporcionan confort y son una garantía de seguridad, ya que ayudan a controlar el vehículo a altas velocidades y en situaciones de riesgo. El estado de la carretera, la carga del vehículo, el kilometraje y efectos de desgaste como el frío, el calor y la humedad, son factores determinantes para el buen funcionamiento del amortiguador, y se aconseja realizar revisiones periódicas cada 20.000 kilómetros.

Escobillas limpiaparabrisas

En caso de lluvia, las escobillas limpiaparabrisas representan un papel fundamental. Si no barren bien y no evacuan correctamente el agua, (o granizo o nieve), impiden una buena visibilidad, la cual es vital cada segundo al volante.

Cuando las escobillas dejan zonas por barrer, originan extraños empañados, hacen ruido o saltos, ha llegado el momento de su reposición.

Todos los filtros

Los autos tienen varios tipos de filtros, y en general deben reponerse cada año:

Aceite: El filtro del aceite tiene el propósito de retener las partículas metálicas que se desprenden de los componentes del motor por su desgaste normal, evitando perjudicar su rendimiento o incluso daños graves.

Aire: Un filtro en buenas condiciones garantiza que el aire que llega al motor no contiene partículas abrasivas, así la combustión se realiza en las mejores condiciones y el consumo de combustible se mantiene en los niveles recogidos en el catálogo del vehículo, al igual que ocurre con las emisiones contaminantes.

Combustible: Su función es eliminar las impurezas del combustible antes de que lleguen al motor, es decir garantizar la salud del motor. Se debe consultar a un especialista para su revisión y cambio periódicamente.

Llantasa

Son muchos los factores que influyen en la vida útil de las llantas, como el clima, el uso naturalmente, características del terreno, pero no hay un número de kilómetros estimados para conocer su verdadero desgaste, depende de la marca y el modelo.

Lo que sí es un hecho, es siempre amantener correctamente los índices de presión aconsejados por el fabricante, así como estar siempre muy pendiente de la aparición de vibraciones y ruidos, de desgaste, de cualquier comportamiento extraño detectado al frenar. Además, se recomienda llevar el auto periódicamente a un especialista para su alineación, sobre todo si se realizará un largo viaje.

Frenos

Si los frenos están en mal estado se necesitarán más metros para detener el auto ante cualquier emergencia. El desgaste de los componentes del sistema de frenos depende mucho de las características de la conducción y también del medio por el que ruede el vehículo.

Por eso, es muy importante que este sistema sea revisado por un especialista al menos una vez al año. No es fácil detectarlo, puesto que los componentes del freno se van deteriorando poco a poco y, salvo que sea muy marcada la diferencia como una lenta respuesta al frenar, ruidos, chirridos, en cuyo caso se debe acudir al taller de inmediato.

Lubricantes

Los lubricantes minimizan el desgaste de las piezas del motor, canalizan las partículas metálicas surgidas de ese desgaste hacia el filtro, ayudar a la refrigeración y evitar diminutas fugas en el circuito por sus propiedades sellantes.

El período de vida útil de los lubricantes se ha elevado mucho en los autos modernos. Los talleres aconsejan comprobar el nivel del depósito de lubricante cada 1.500 kilómetros, una costumbre excelente que ahorra muchos sustos, disgustos y dinero. Si se debe reponer, elegir el tipo de lubricante aconsejado por el fabricante del vehículo.

Iluminación

Es indispensable ver y ser visto, por lo que no hay que olvidar mantener el sistema de iluminación y señalización en condiciones óptimas comprobando mensualmente el buen funcionamiento de todas las luces (posición, cruce, carretera, freno, marcha atrás, intermitentes y antiniebla) y mantener su superficie exterior libre de barro y suciedad. Asimismo, siempre que se detecte alguna irregularidad (una bajada en la intensidad, por ejemplo) debe consultarse a un especialista.

Sistema de escape

Los sistemas de escape deben reducir las emisiones contaminantes y el ruido de los gases al salir del motor, y debido a esta fuerte tarea no se puede evitar su deterioro, siempre se notarán fugas o corrosiones. Los tubos de escape defectuosos pueden aumentar el peligro de incendio del vehículo y provocar asfixias e intoxicaciones en lugares cerrados, la reparación o reemplazo periódicamente es indispensable siempre bajo el consejo de un especialista.

Correa de distribución

La correa de distribución sincroniza los cuatro tiempos del motor, la apertura y cierre de las válvulas de admisión y escape y la chispa de la bujía. Es muy importante seguir los consejos del fabricante del vehículo porque, al ser un elemento que se desgasta, su rotura puede ocasionar una grave y cara avería en el motor.

Seguridad total vía GPS

Ningún seguro o mantenimiento mantendrá el mayor cuidado y seguridad del vehículo que la más avanzada tecnología GPS, la cual ofrece no solo la ubicación del vehículo en tiempo real, sino permite bloquearlo o desbloquearlo, su recorrido histórico, y lo mejor, la recuperación inmediata y efectiva en caso de robo. Un vehículo con el sistema GPS de Tracklink siempre estará seguro.